martes, 23 de febrero de 2010

SHIN SASAKUBO. GUITARRA ANDINA CON MATICES ORIENTALES.


La música es un lenguaje universal, que independientemente de la raza, idioma o locación geográfica, transmite emociones y vivencias que hermanan naciones y transciende barreras culturales.

Un ejemplo cercano de lo anteriormente mencionado es el caso del guitarrista de origen japonés Shin Sasakubo, quién interpreta con singular maestría música del acervo cultural peruano.

A la pregunta de : Como un músico japonés llega a interpretar e identificarse con la música tradicional peruana que incluso no goza de exposición mediática en su propio país de origen? Shin responde:

“La música andina está desde siempre en mi memoria y mi corazón. He recorrido muchos lugares en el Perú y siento que he recibido de su gente un valioso legado que debo preservar, y por eso la seguiré tocando.”

Su inspiración principal como él dice son “los sonidos del pueblo (andino)”
“La música de trabajo, de la chacra; de la gente que convive con la naturaleza. La música que palpita con ellos en cada momento de sus vidas, que tiene alma; música que está viva, que tiene elementos únicos, que solo están allí, y no se encuentran en ningún otro lugar del mundo”.

Guitarrista, compositor, e investigador de la música andina, Sasakubo (Tokio - 1983) tuvo desde temprana edad una fuerte conexión con la cultura peruana.

Su padre llegó al Perú por motivos laborales: capacitar al personal del Instituto Nacional de Salud Mental Honorio Delgado-Hideyo Noguchi, ( hospital construido con aportes del gobierno japonés).

Era 1983, y el recién nacido Shin se quedó con su padre en Lima. Aquí aprendió sus primeras palabras y dió sus primeros pasos. También aprendió a reconocer y apreciar el sonido de la quena, instrumento que en el hospital se usaba para tratar el asma.

De vuelta a su natal Tokio , Shin se empeñó en dominar la quena, la zampoña y el charango, a partir de los tres años.

Más tarde, inspirado por las interpretaciones del maestro de la guitarra ayacuchana Raúl García Zárate, gracias a unos “cassettes” que su padre trajo de Perú, inicia a los nueve años sus estudios de guitarra clásica con los destacados maestros Norikazu Shimazaki y Tsunekazu Adachi.

Luego de concluir su formación académica , y conseguir ser reconocido en el mundo de la guitarra clásica japonés, vuelve al Perú, e inicia su viaje de aprendizaje musical por el sur andino de este exótico país, internándose en pueblos aislados, para beber de la misma fuente de la tradición viva, transmitida mayormente en forma oral y compartiendo al mismo tiempo la vida cotidiana con sus habitantes.

A su vez estudia con grandes maestros de la guitarra andina peruana como Raúl García Zarate (su principal influencia musical) y Manuelcha Prado, y tiene contacto con grandes intérpretes de la música popular peruana como: Alberto Juscamaita, Daniel Kirwayo, Jaime Guardia, Máximo Damián, Javier Arias, Eusebio Huamaní, Freddy Flores, Manuel Silva y Oscar Avilés…,con quienes establece un sólido y estrecho vinculo, causando en ellos una grata impresión tanto por su calidad interpretativa, así como por su gran sensibilidad e identificación con la música andina.

Estas intensas, e enriquecedoras vivencias, lo nutren e inspiran para continuar su proyecto personal de investigación sobre los sonidos del Perú.

A Shin, por su parte, le gusta interpretar a compositores peruanos como Theodoro Valcárcel y Armando Guevara Ochoa. “Me extraña y apena que sus obras se incluyan poco en el repertorio de músicos peruanos.”

Le gusta el trabajo de Édgar Valcárcel, Francisco Pulgar Vidal y Celso Garrido Lecca; y de los más nuevos Fico Tarazona y Nilo Velarde. “Realmente, hay un sinnúmero de compositores, cuya obra no tiene el reconocimiento que se merece.”

Además de intérprete e investigador, Shin asume la tarea de difusor de la cultura peruana ,lo que le ha llevado a pasear su repertorio de temas tradicionales andinos, a escenarios del Perú, Argentina, Bolivia, Chile, Grecia y Bulgaria.

El 2008 produjo un disco, dedicado a José María Arguedas, un álbum que es un “diálogo” con la obra del escritor peruano. El mismo año fué invitado por la Embajada del Perú en el Japón, para realizar un recital de música peruana, en el agasajo que se le ofreció al Presidente de la República del Perú Dr. Alan García Pérez, durante su visita oficial al Japón. A los numerosos conciertos en el archipiélago japonés, se suman los realizados en Grecia y Bulgaria.

Conformó el jurado calificador del “Festival Internacional de Guitarra Gotze Delchev 2008″. Participa en diversos eventos vinculados a la cultura y los sonidos del Perú, destacando la conferencia dada en el Instituto de Estudios Latinoamericanos de la Universidad de Estudios Extranjeros de Kyoto.

                             

Pocas cosas han cambiado desde la primera vez que Sasakubo regresó al Perú para iniciar la búsqueda de su propia voz como intérprete y moldear su propuesta artística. Ahora Shin habla un buen castellano, vive en Saitama, Japón, con su esposa ayacuchana Irma y su hijita Cusi.

Lo que no ha cambiado en absoluto es el amor y compromiso que tiene para con la música andina peruana, unido también a su preocupación por que los jóvenes intérpretes continúen la posta dejada por quienes fueron sus maestros y que de esta manera lo tradicional sobreviva y no se extinga absorbida por la globalización.

DISCOGRAFIA:

Sasakubo tiene diez producciones discográficas en su haber todas ellas dedicadas a a la música tradicional peruana:

. Adiós pueblo de Ayacucho (2005)

. Amanqaycha (2005)

. Ayacucho – 20 memorias (2006)

. Alma de la guitarra (2006)

. Runa Simi. A dúo con la cantante Ellen Burhum (2007)

. Vírgenes del Sol (2007)

. Ayacucho I – Tradicional (2007)

. Ayacucho II – Kirwayo (2007)

. A José María Arguedas (2008)

. John Dowland returns (2009)

.En el CD "A José María Arguedas"  le rinde homenaje al conocido escritor peruano a quien Shin ha leído traducido al japonés, lo que le ha permitido un mejor conocimiento de la cosmovisión y el pensamiento tradicional andino.

. En su última producción intitulada “John Dowland returns” donde interpreta en su mayoría sus propias composiciones, podemos apreciar la profunda influencia andina en su música que se enriquece al fusionarse con su particular aporte oriental.



jueves, 4 de febrero de 2010

MARIA LUISA ANIDO (II PARTE)

En un reportaje de la revista "El Mundo de la Guitarra", de Setiembre de 1987 y titulado "María Luisa Anido: ochenta años de pasión", con gran cariño y humildad señala que su actividad ha sido básicamente pedagógica y que entre sus alumnos más destacados figuran Nelly Menotti, Omar Atreo, Guillermo Pérez Quer, Juan José Falú, Joana Albiol, Montse Oterino, Eulogio Dávalos, María Isabel Siewers, Maria Esther Guzmán, Jorge Cardozo, Ariel Rodríguez, Luis Casares, Carlos Di Fulvio, Juan Carlos Pratto, Vicente Elías, Susana Simon, Fanny Castro, Cristina Cid, Mirta Pepe, Nilda Urquiza... Muchos alumnos que ahora he reencontrado, dijo y que, al nombrarlos, temo cometer omisiones...

Se han formado diversos conjuntos con su nombre como "The Anido Guitarduo", formado por Annette Kruisbrink y Arlette Ruelens, holandesa y belga respectivamente, quienes interpretan obras en su mayoría compuestas por Annette. Entre ellas figura una composición llamada:" Dedicada a María Luisa Anido". Ambas artistas viajaron en 1995 a conocer a la Gran Dama de la Guitarra.
También el trío italiano "María Luisa Anido Guitar Trio", formado por Clara Campese, Paola Troncone y Fabio Mastroianni y el "María Luisa Anido Classical Guitar Academy", dirigido por Clara Campese honran con sus interpretaciones y composiciones el nombre de la gran artista.

Se le tributaron numerosos homenajes y en Buenos Aires tuvo lugar el "Homenaje a la guitarrista argentina María Luisa Anido en sus ochenta años", año 1987. Este merecido homenaje le hizo decir en una entrevista: ...Una sala repleta de personas muy queridas, palabras hermosas y un concierto extraordinario. Si mi corazoncito aguanta esto habré superado una de mis más fuertes emociones...

En Morón, su ciudad natal, fue declarada Ciudadana Ilustre, el 25 de julio de 1987.
Otros dos homenajes se le tributaron en 1993 en la sala Martín Coronado del Teatro San Martín de Buenos Aires y el hall central del mismo teatro, en diferentes días de ese año. Recibió cálidas, justas y emocionadas palabras de su gran amiga Nelly Menotti quien la tuvo también de maestra y las actuaciones, entre otros artistas, de María Esther Guzmán, José Luis Rodrigo, Lucio Núñez, Víctor Villadangos, Cristina Cid...La presentación, impecable, estuvo a cargo de Sebastián Domínguez quien no escatima espacio en su programa De Segovia a Yupanqui para hacer oír las grabaciones de María Luisa Anido e historias de su vida y su carrera a cargo de sus numerosos amigos, ex alumnos y admiradores.

No debemos olvidar dos facetas muy importantes en el arte de María Luisa Anido: la de compositora y la de profesora. Como compositora escribió numerosas obras para guitarra:

Adiós, adiós, (canción mexicana)
Aire norteño, (Ricordi Americana, Buenos Aires).
Aire de vidalita, de la "Serie Americana". (Bèrben, Italia).
Barcarola, del "Álbum de 10 obras para guitarra", (Ricordi Americana, Buenos Aires).
Boceto indígena, de "Impresiones argentinas para guitarra". Ediciones Julio Korn (Buenos Aires)
Canción de cuna, (Bèrben, Italia)
Canción del Yucatán, del "Álbum de 10 obras para guitarra", (Ricordi Americana, Buenos Aires)
Canción n º3 (Bèrben, Italia)
Canto de la llanura, de "Impresiones argentinas".
Catamarqueña, (vidala), de "Impresiones argentinas".
Chacarera
Dandansoy, (Editorial Randolph, Buenos Aires).
Danza, (Unión Musical ediciones s.l., Londres).
De mi tierra, (impresiones camperas), del "Álbum de 10 obras para guitarra" (Ricordi Americana, Buenos Aires).
El Misachico, de "Impresiones argentinas".
Evocación indígena, de "Impresiones argentinas".
Gato popular (arreglo de M. L. Anido), (Casa Núñez, Buenos Aires).
Gris, (preludio nostálgico), (Unión Musical Española, Madrid).
Lejanía, (de "Preludios nostálgicos" , (Ricordi Americana, Buenos Aires).
Mar, (preludio nostálgico), (Unión Musical Española, Madrid).
Preludio criollo, de "Impresiones argentinas".
Preludio pampeano, de "Impresiones argentinas".
Poutpurri de pericones, (Baile norteño- De mi tierra-Ritmo popular), (Casa Núñez, Buenos Aires).
Santiagueña, de "Impresiones argentinas".
Triste nº1, de "Impresiones argentinas".
Variaciones camperas, de "Impresiones argentinas".
Preludio campero nº3, del álbum "Con cinco piezas" (Bèrben).
Preludio criollo, de "Impresiones argentinas"
Preludio pampeano, de "Impresiones argentinas".
Santiagueña, de "Impresiones argentinas".
Triste, (Guitar review)
Variaciones camperas, de "Impresiones argentinas".
Vidala, de "Impresiones argentinas.

María Luisa Anido fue Embajadora cultural de su país natal, Argentina, y de la guitarra como Instrumento Mayor. Dedicó su vida al servicio de la guitarra. Sus conceptos, pensamientos y consejos han quedado plasmados en innumerables reportajes, conferencias, clases, charlas y libros.

Maria Luisa Anido en Moscú, junto a un afiche que publicita uno de sus conciertos.

Algunos de ellos se describen a continuación:

Compongo lo que la guitarra me sugiere.
He enseñado desde que tenía catorce años y aún lo sigo haciendo con el mismo amor, con el mismo interés. Hay que hacer docencia pero sin rigidez, con conceptos claros y sencillos. Haciendo que se conozcan los distintos estilos de tal manera que sea agradable al oyente pero, al mismo tiempo, con la mayor profundidad posible.

Respecto del sonido en la guitarra: ... ¡No le quiten sonido ni la maltraten porque sino, van a ser guitarristas de la primera fila. Se lo debe privilegiar sin desmedro de la interpretación. Aprovechen los mil matices que tiene!

Siempre instaba a mantener la propia personalidad: ... ¡defiéndanla aún a costa de los profesores!. Jamás se debe imitar a nadie. El alma es el fiel reflejo de esa personalidad y un alma cultivada en los valores esenciales trasciende a través de la música. Copiar modelos no sirve. Hay que ser uno mismo. Arriba del escenario se modela esa personalidad que es necesario defender toda la vida.

Hay que ser muy sincero consigo mismo pues de lo contrario NO PODEMOS SERLO CON LOS DEMÁS y como la música es una expresión que va de corazón a corazón, si se finge o imita no convence. Los artistas que perduran como compositores, intérpretes, pintores o lo que fueren, tienen personalidad propia.

Siempre tenía muy presente un concepto de Pujol: La guitarra es un instrumento querido de todos y mal conocido de muchos.
No encerrarse en un solo estilo. Debe darse a conocer la mayor cantidad de posibilidades que tiene la guitarra.

Es conveniente tocar en público desde los inicios, desde luego, en forma gradual.

Hay que leer la partitura en forma impecable. No se debe dejar nada librado al azar. Tanto el apasionamiento como el temperamento se deben encauzar dentro de una técnica depurada.

Lo primero que todo artista debe mirar es su sensibilidad porque las acrobacias en el instrumento no son un fin, para eso está el deporte. El arte es otra cosa: es espíritu, especialmente en la guitarra, que para mí, es como la prolongación sonora del alma.

Se debe perseguir una honda interpretación, emotiva y sincera. La técnica puede perfeccionarse con el entrenamiento, el don natural, la gracia, el talento no.
Se tiene o no se tiene. No se puede adquirir. Es necesario desarrollar la técnica con disciplina y paciencia para que pueda florecer ese don.

Una obra de arte sin público languidece y muere.

Genios hay unos pocos. Artistas hay muchos. El genio incendia y arrasa. Pero está la falange de jóvenes, la carne de cañón del arte. Si esos no pueden sacrificar su vida con alegría por el ideal, el fenómeno artístico irá desapareciendo de nuestra vida y perderemos la oportunidad de ser realmente un país.

Hay que apoyar, según la escuela española, para destacar la melodía, y a gusto del intérprete. Esta forma de pulsar sostiene mucho la mano, da seguridad, si no, salta como una pelota.

Todo ser humano necesita, a veces, una especie de diálogo espiritual con el infinito, necesita soñar con esa belleza inmaterial siempre emocionante de la poesía o de la música, recreando con colores o sonoridades, las misteriosas impresiones que despiertan en su alma. El arte me ha ayudado a transmitir esos sentimientos y comunicarlos a gente de todo el mundo. En mi Argentina natal, en los tiempos lejanos de mi infancia, el paisano, el gaucho, viajaba a lo largo de la pampa, a caballo y con la guitarra al hombro, dialogando con el infinito. Mi personalidad, si alguna tengo, se formó contemplando lo que ellos contemplaban, en los campos de Monte, Argentina. Cuando volví, hace poco, había muchos árboles y yo extrañé aquella redondez del horizonte. A mí el infinito de la pampa no me produce tristeza sino emoción estética.

Lo importante es traducir sinceramente lo que uno siente, es difícil alcanzar esas sinceridad. La escuela es necesaria para poder expresar pero, no enseña la manera de unir la técnica con la emoción y el sentimiento.

Me gusta la guitarra sonora y apasionada pero también la melancólica. El caso es darle la mayor cantidad de matices posible. Soy una entusiasta de la guitarra popular porque allí se muestra que la guitarra es el instrumento que está más cerca del alma porque es el que está más cerca del cuerpo, contra el pecho. Se la abraza con cariño, como a un niño. Es el más íntimo de los instrumentos y el más discreto porque tiene poco sonido. Es el más espiritual.

Me da mucha alegría ver a tantos niños que se dedican a la guitarra. Los tiempos han cambiado: a principios de siglo, todos le decían a mi padre con un matiz de escándalo: "¡Cómo, mujer y tocando la guitarra!". Yo me sentía humillada pero mi padre, a quien en el recuerdo admiro cada vez más, persistió en su proyecto de volverme guitarrista sin saber quizás, que así me daba una "tarjeta de crédito" o "pasaporte" universal. Me volví una viajera incesante, con la guitarra al hombro, como los gauchos de mi lejana infancia. La guitarra fue mi pasaporte...

A mí me gusta la honestidad conmigo misma para poder serlo con los demás.

En enero de 1995 se celebró en Barcelona el Primer Concurso Internacional de Guitarra organizado por Eulogio Dávalos, con el que se le rindió homenaje y cuya segunda edición debió ser postergada a causa de su fallecimiento el 4 de junio de 1996, en Tarragona, España. Los diarios del mundo entero han rendido encendidos elogios a su labor artística y humana como Embajadora cultural de Argentina, a esta Dama de la Guitarra, La Segovia Femenina.

A continuación se transcriben algunos de los numerosos elogios y comentarios que sobre ella se hicieron a través de su larga y fecunda vida:

En las manos de María Luisa Anido, la guitarra suena frecuentemente como toda una orquesta.
(Dimitri Kabalevsky)

Escribir sobre María Luisa Anido ocuparía muchas páginas de encendidos elogios. Para la República Argentina, es una gloria nacional. Para nosotros, los amantes de la guitarra de todo el mundo , un espejo y un constante estímulo para poder alcanzar las cimas insuperables que ella ha logrado. (Mariano Perea Gallaga, Vicepresidente de la Asociación Guitarrística Madrileña)

Para Japón, María Luisa Anido es única, la Segovia Femenina. (Sankei Shinbun, Tokyo, noviembre de 1971)

La guitarrista argentina María Luisa Anido es, en efecto, de la clase de un Segovia: la misma pureza de estilo, la misma elegancia, el mismo refinamiento aristocrático. (Jean Cotte, France Soir, febrero de 1972)

Asombrará al mundo. (Rabindranath Tagore)

María Luisa Anido fue para mí una revelación. La impresión que me produjo no se borrará jamás de mi mente. Dotada de un temperamento artístico de primer orden, se adapta admirablemente a todos los estilos y formas musicales y en cuanto a su tecnicismo, no sólo es insuperable, sino que en muchos aspectos sobrepasa todo lo imaginable. (Miguel Llobet).

Maria Luisa Anido, dibujo hecho por Miguel Llobet

La vida de María Luisa Anido es una vida ejemplar de artista. Sin reclamo ni huecas alabanzas, con la verdad en su entendimiento, en su corazón y en sus manos, ha llevado con humildad en sus brazos de mujer el encanto, lírico y emocional, de la noble guitarra, por todos los ámbitos de la tierra. (Emilio Pujol)

En su larga carrera ha sabido siempre aunar la devoción por su instrumento con una conciencia artística que ha sabido ser faro y guía para la generación de ilustres guitarristas que la siguen y encuentran en ella el más perfecto y acabado ejemplo. Su depurada técnica y sensibilidad la hacen acreedora de nuestro agradecimiento, a los compositores que hemos puesto en la guitarra nuestras más caras ilusiones y que en María Luisa Anido no se han mostrado nunca insatisfechas, antes, por el contrario, se han visto siempre comprendidas y realizadas de la manera más firmemente musical. (Joaquín Rodrigo)

María Luisa Anido es una maestra absoluta de la guitarra que arranca de este instrumento todo lo que de él es dado obtener: extrema belleza de tono, ilimitada variedad de expresión, y todos los efectos imaginables, logrando cambiar maravillosamente la firmeza del hombre por la delicada gracia de la femineidad. Sus dedos extraordinariamente ágiles pero disciplinados, son capaces de producir todos los contrastes en tono y volumen y todas las delicadezas de expresión desde el resonar profundo de los bajos hasta la impredecible selección de cuerdas escogidas.
Anido es una artista suprema y una virtuosa de la guitarra no superada. Ella probó plenamente la impresión de Berlioz que afirmaba que "La guitarra es una orquesta en miniatura" (Doctor B. A. Perrot, presidente de The Philarmonic Society)

María Luisa Anido es una virtuosa de la guitarra que extrae de ella todas sus posibilidades sonoras. Sorprendiendo más de una vez por la virtuosa brillantez de sus ágiles dedos. Entre el rico programa queremos remarcar especialmente las bellas danzas y canciones latinoamericanas presentadas por la artista en apropiado estilo. En permanente inversión del sentido melódico y rítmico, alturas dinámicas, tiempos retraídos en descargas de energía y viceversa. Un amplio aplauso de una sala repleta agradeció el ARTE lleno de efectos de la guitarrista.
(Wiener Kritik, Viena, 1952)

Con su concierto en la Schubertsaal, colocó a la guitarra en un lugar de respeto y demostró que domina en alto grado el Arte de ejecutar ese instrumento. El programa incluyó algunas adaptaciones de obras de Manuel de Falla, Albéniz y un andante de Mozart, técnicamente sin tacha. EL público que ocupaba hasta el último asiento dio muestras de aprobación sensiblemente impresionado. (Apleiter Zeitung, Viena, 1952)

Un portento, una auténtica revelación. La Anido encantó literalmente al auditorio. Éxito vibrante.
(Corriere Della Sera, Milán, 1952)

Trae en su ágil juego clásico una hermosa nitidez y real desenvoltura. La sonoridad es plena, viva, flexible. Se percibe en la artista una lumbre de ardor. En otros momentos ella se expresa con una elegancia femenina.
(Cette Semaine, París, 1952)

El virtuosismo de María Luisa Anido es maravilloso y su interpretación refinada. Como un caso poco común ella será profeta en su tierra, y lo será también en la extraña. (Esto lo escribió Domingo Prat, maestro de guitarristas, cuando Anido ya había dejado de ser una niña prodigio y alcanzaba la consagración como intérprete consumada, sensible, de técnica depurada y acabado dominio de su instrumento).

La guitarra está en las mejores manos (Diario Clarín, 10 de mayo de 1987, Napoleón Cabrera).

En otro titular del mismo diario y por el mismo crítico musical leemos: No tenemos una embajadora similar.

Ante tantos y tan merecidos elogios, sobran las palabras...

María Luisa Anido a los diez años junto a su maestro Miguel Llobet

Emilio Pujol, Domingo Prat, Don Juan Carlos Anido, María Luisa Anido y Miguel Llobet

Emilio Pujol, Miguel Llobet, María Luisa Anido y Domingo Prat

Concierto en el Salón La Argentina


María Luisa Anido, jovencita


Miguel Llobet


Maria Luisa Anido en el estudio del Sr. E. Roveri, Milán, 1957

De visita en Japón, 1952

Escuchando a un virtuoso japonés ejecutar un típico instrumento musical

Probando una guitarra de un luthier japonés

Portada de uno de los programas hechos en Japón




Transcripción original de Llobet con la siguiente dedicatoria: "A Su Majestad, la Emperatriz María Luisa Anido 1ª de Argentina con el simple y modesto homenaje que le ofrece su más humilde y fiel vasallo, Miguel Lobet". En la ciudad de Buenos Aires, Capital de los dominios de la mencionada y Egregia Majestad, 11 de Noviembre de 1922

En la casa del señor E. R. Roveri, presidente de"Amigos de la Guitarra" de Milán, a la izquierda de María Luisa Anido el Maestro Miguel Abloniz

Durante la ejecución del Concierto de Aranjuez de Joaquín Rodrigo, con la Orquesta Sinfónica de Quito (Ecuador), dirigida por el maestro Ernesto Xanco